miércoles, 28 de marzo de 2012

COSAS QUE PASARON AYER (XX)

Nuestro fiel colaborador Melchor Lasiesta nos cuenta su reflexiva experiencia de ayer. Al igual que el bueno de Melchor, podéis relatarnos todas las cosas que os hayan pasado el día de ayer por medio de nuestro correo electrónico (anonimosindocumentados@gmail.com), y leer todas las historias en http://www.cosasquepasaronayer.blogspot.com/.



Como ciudadano que soy, la cosa política me debería interesar más de lo que me interesa. Reconozco que yo soy responsable de parte de esta desgana que me subyuga, pero no es menos cierto que los políticos parecen poner todo su empeño en que esta situación no cambie. Sus disputas de patio de colegio echan por tierra todos mis intentos de acercarme al fondo de los asuntos. A la espera de un grupo político con cuya madurez me pueda identificar, sigo votando en blanco.

Como trabajador que soy, la cosa sindical debería llevarla en mis venas más de lo que la llevo. Pero, en casi todos los sentidos, los sindicatos no dejan de parecerme también partidos políticos, por lo que valga para ellos lo susodicho.

Expuestas así las ideas previas, ayer trataba de posicionarme sobre la pertinencia de la huelga general convocada para mañana. Entiendo las razones profundas que, a favor o en contra, defienden desde uno u otro bando; pero no he encontrado aún a nadie que sepa desarrollar esas cuestiones abstractas en el contexto actual hasta llegar a una conclusión que me haga inclinarme hacia una postura o la opuesta. De tal modo que me lancé a la calle y, en busca de esos argumentos, entré en la sede de mi ciudad de uno de los sindicatos mayoritarios.

Una chica treintañera pintaba una pancarta en el suelo.

YO: Buenas tardes. ¿La secretaría, por favor?
CHICA TREINTAÑERA: Buenas tardes. La secretaría está aquí a la derecha, pero no vas a encontrar a nadie: la secretaria soy yo. ¿Puedo ayudarte en algo?

No albergaba esperanza de que brochoparlante alguna fuera a solucionar mis dudas, que habitaban en una esfera bastante más elevada que el suelo sobre el que su culo se arrastraba. Pero tampoco me esperaba un trato tan atento en primera instancia, acostumbrado a estar rodeado de cagüendioses y joderes doquiera que fuese.

YO: A lo mejor sí puedes. Venía a que me convencieras de por qué tengo que hacer huelga pasado mañana.

Abrazada a sus rodillas y sin soltar la brocha, comenzó a hablar con cierto entusiasmo sobre la crisis, los bancos, la ultraderecha, el paro, los recortes sociales, la reforma laboral, la opresión empresarial, los artículos 7 y 28 de la Constitución de 1.978, la República, la Constitución de 1.812… Yo escuché bastante menos distraído de lo que cabía esperar, aunque ciertamente fue una parrafada de mucho cuidado.

YO: Vamos a ver si lo he entendido bien. Me estás diciendo que, en las circunstancias actuales de crisis económica, paro y bla, bla, bla, los sindicatos os veis empujados sin remedio a convocar una huelga general, máxime cuando la Constitución Española os da respaldo para ello.
CHICA TREINTAÑERA: Efectivamente, podría resumirse así. Lo has entendido perfectamente.
YO: Es más. No creo equivocarme si digo que la actividad propia sindical en este contexto particular no es ni más ni menos que llevar a los trabajadores a la huelga general. Es vuestro cometido y razón de ser.
CHICA TREINTAÑERA: Exactamente. Un sindicato se define por eso.
YO: Pero entonces, la misma huelga que hace que un panadero deje de amasar panes y un profesor no imparta clases debería hacer que los sindicatos no llamaran a la huelga, ¿no?

Prometo que este razonamiento -que ni siquiera sé si es una paradoja, contradicción, sinécdoque o metonimia- me salió directamente del alma, y al alma le debió de llegar a la chica, porque se quedó en esa misma postura como una estatua, sin pestañear, sin articular palabra. Incluso la brocha dejó de gotear. Por solidaridad yo me quedé igual, y el mundo pareció estar congelado durante unos instantes de difícil medición. Finalmente, la chica bajó la cabeza, fijó su mirada en la pancarta a medio hacer, volvió a mojar la brocha y trazó unas cuantas líneas. Yo seguía observando sin prisa, hasta que levantó la brocha con asertividad, me clavó sus pupilas y dijo: “Si no pintamos esta pancarta, ¿qué pintamos entonces?”.

Las respuestas que consisten en otra pregunta siempre me han provocado inquietud. En ese momento tenía que decidir por contestar con otra nueva pregunta y crear un bucle infinito o por no decir nada y salir por la puerta por la que había entrado con la misma duda en la mochila. Opté por esto último, no sin antes darle un par de besos a la chica; no era especialmente guapa, pero un rostro treintañero no se tiene tan cerca todos los días y algo de provecho había que sacarle a la jornada.

domingo, 25 de marzo de 2012

BALONCESTO EN ESTADO PURO (XVI)




En San Cristóbal, Arenas de Iguña (Cantabria), los chicos de la mopa se están planteando seriamente pedir un aumento de sueldo. Fotografía enviada a anonimosindocumentados@gmail.com por nuestra querida Mª Jugada Tanque. Esperamos recibir vuestras imágenes en la citada dirección de correo electrónico y os invitamos a ver todas las instantáneas en www.baloncestodelosanonimosindocumentados.blogspot.com.

viernes, 23 de marzo de 2012

AL POSO DEL OTOÑO TOLEDO SOPLA (XIX)

Nuevo repertorio de la inquietante obra de Luciano Nimato. Podéis enviarnos vuestros propios descubrimientos a anonimosindocumentados@gmail.com y ver todos los palíndromos recopilados hasta el momento en http://www.palindromosanonimosindocumentados.blogspot.com/.



A Rita sale, la sátira. (17)
Al reparar otro colosal láser -talla tres- allá solo, cortó rara perla. (56)
Allí lo pela: sólo sale polilla. (25)
Ana los aseó, jabón a mano, bajo esa solana. (33)
Arrimó más labores a cada casero: bálsamo, mirra... (39)

El biólogo mamó idioma mogol oíble. (29)
Fulano: Isa, con Al Pacino, tomó tónica. ¿Plan ocasional? Uf… (45)
¡Libe de la soja rácana, carajo! ¿Sale débil? (33)
Nazi liga salsas a mí si masas las agilizan. (35)
Ni tu país le arañará el “Sí” a Putin. (27)

Sádica osada, sor, sanaba sedes a base de sábanas rosadas o ácidas. (53)
Sara: si vas a Titán, ¿avisarás? (23)
Senil o joven rey asirio, vivo iris: ¡ayer nevó, jolines! (43)
¡Sí, sí! ¡La rapsoda tártara trata dos parálisis! (37)
Sola pasa las salas a palos. (22)

miércoles, 21 de marzo de 2012

COSAS QUE PASARON AYER (XIX)

El enrevesado mundo interior de nuestra incansable amiga Dulcinea O’Callaghan se desparrama con fuerza en este relato con el que probablemente nos sentiremos muy identificados. No dudéis en contarnos cualquier cosa que os haya pasado ayer (anonimosindocumentados@gmail.com). Para leer todas las historias, pinchad en http://www.cosasquepasaronayer.blogspot.com/.



Cuando ayer por la mañana me levanté y me miré en el espejo del baño, todo el peso de mis 28 años recién cumplidos cayó sobre mí. Podría decirse que una cara legañosa, aún adormilada, embutida en un pijama sin más forma que los vuelos de las mangas y las perneras no entiende de edades y aplaca los ánimos de trolls y ninfas por igual. Podría decirse que 28 años no son muchos, son más bien pocos. Podrían decirse muchas cosas. Pero yo sabía de sobra que mi rostro y todo mi cuerpo en general sufrían una carga genética que aplastaba cualquier otro comentario de la misma manera que el espejo del baño aplastaba mi autoestima.

No soy yo una chica especialmente fea, ni mucho menos especialmente guapa. Esa es la cuestión. He heredado cada una de las características físicas más insulsas de mi madre y de mi padre. Podría tener la nariz aguileña de papá, que parece uno de esos cacharros para abrir latas de melocotón en almíbar, pero mi nariz es patéticamente normal, de tamaño medio e inclinación estándar. Podría tener los ojos insultantemente minúsculos de mamá, cuyas intenciones nunca sabes porque ni siquiera la expresividad encuentra sitio entre las pestañas, pero tengo unos ojos corrientes, de color marrón como todo el mundo, ni siquiera miopes para poder adornarlos con unas gafas fosforescentes o de culo botella, da igual. Podría haber sacado las canas de papá, que ya fue a la mili ondeando melena blanca en una clara muestra de su pacifismo, pero mi cabello es también marrón, ni siquiera castaño, que suena mejor. Es marrón. Mis tetas podrían dar botes como las de mamá, incapaces de ser sujetadas por sujetador alguno sobre la faz de la Tierra, pero yo encuentro talla en cualquier tienda en la sección Sujetadores Talla Vulgar.

Evidentemente, preferiría ser guapa a una chica del montón como soy, pero también preferiría ser fea. Me gustaría que se fijaran en mí por cualquier detalle que sobresaliera de lo común: una barbilla derribamuros, unas orejas antimisiles. Que pudieran decir: “¡Ah, sí, Dulcinea, la del culo mausoleo!”. Pero nadie puede decir eso porque nadie sabe cómo describirme. “¿Has visto a Dulcinea?”. “¿A quién?”. “A Dulcinea, la de…, la del…, la…, a Dulcinea O’Callaghan”. Es así: lo más llamativo que tengo es el nombre.

¿Cómo reaccionaría un cirujano estético si le dijera que me hiciera unos retoques? “No te puedo hacer unos retoques porque no tienes nada de donde agarrar”. “¿Cómo?”. “Si tuvieras una barbilla derribamuros, podría limar de aquí y de allá; si tuvieras unas orejas antimisiles, podría…”. “Ya, ya, no hace falta que siga. ¿Y no podría darme una paliza para desfigurarme el rostro como en las películas?”. “¿Como en qué películas?”. “No sé, alguna habrá”. “Mira, lo que puedes hacer es dejar pasar unos años, esperar a que la flacidez haga su trabajo, y entonces vuelves por aquí para ver lo que podemos arreglar, ¿de acuerdo?”. “¿Cuántos años?”. “¿Cuántos tienes ahora?”. “28”. “Un par de ellos…”. “Joputa…”.

Nota a pie de página: la próxima casa que compre, que no tenga espejo en el cuarto de baño.

lunes, 19 de marzo de 2012

AL POSO DEL OTOÑO TOLEDO SOPLA (XVIII)

Nuevo repertorio de la inquietante obra de Luciano Nimato. Podéis enviarnos vuestros propios descubrimientos a anonimosindocumentados@gmail.com y ver todos los palíndromos recopilados hasta el momento en http://www.palindromosanonimosindocumentados.blogspot.com/.



Adán, ¿reparto a sor Ana Rosa otra pernada? (33)
Ajora las alas a la sala roja. (23)
Allí va Ramón a reconocer ano: maravilla… (33)
¡Ánimo, Nerea! En Asesoría Jairo se sanea ERE, nómina… (41)
Asarás ajos no con soja, sarasa. (25)

Da diva cal azul, reno, para poner luz a la cavidad. (39)
El aviso sobre hoces os aportó allá otro paso seco herboso, sí, ¿vale? (54)
Icono con icono cónico no conocí, ¿no? ¿Conocí? No conocí. (43)
No lave mil buses ese sublime valón. (29)
Rabie, etarra: Nuria avala a Álava, a Irún, Arrate (Éibar)… (43)

¿Sacudes a Lisa, Ana, Susana…? ¿Así las educas? (33)
¡Sagrada Ave María! ¡La ira me va a dar gas! (31)
Sara, bilis ácida sádica sí libarás. (29)
Sara: tal edad, a su amada madama usada, delatarás. (39)
Sí, esnifaré sola moco malo, Serafín. ¡Seis! (33)

viernes, 16 de marzo de 2012

BALONCESTO EN ESTADO PURO (XV)




Veamos este instructivo ejemplo de la importancia del juego del poste sobre la línea de fondo contra las defensas zonales. Valdemaras Prevenicius, en su afán por divulgar sus conocimientos, nos envía esta fotografía desde Castillo Pedroso, Corvera de Toranzo (Cantabria). Podéis enviarnos vuestras imágenes a anonimosindocumentados@gmail.com y disfrutar todas ellas en http://www.baloncestodelosanonimosindocumentados.blogspot.com/.

martes, 13 de marzo de 2012

COSAS QUE PASARON AYER (XVIII)

Las vivencias surrealistas del amigo Melchor Lasiesta cristalizan en este ejemplo que tan amablemente da a conocer para nuestro disfrute. Cualquier cosa que os haya pasado ayer podéis enviárnosla a anonimosindocumentados@gmail.com, que es la misma dirección a la que se han mandado todos los relatos, y que pueden leerse en http://www.cosasquepasaronayer.blogspot.com/.



Ayer por la mañana estaba yo fregando el desayuno con sumo cuidado, que las tazas pueden ser muy traidoras, cuando sonó el teléfono de casa. Eran los del INEM pidiéndome el informe que les preparo todos los meses para sacarme un pequeño sobresueldo. Quedé en devolverles la llamada en media hora, pues tenía que acabar de recoger la cocina.

Terminé de fregar, limpié la encimera y barrí el suelo. La mierdecilla del recogedor la trasvasé a una servilleta de papel. Así, bien envuelta y guardada en un bolsillo, salí por la puerta de casa y subí por las escaleras dos pisos más arriba, a donde el vecino del cuarto. Llamé a la puerta y me abrió el vecino del cuarto, quién si no.

YO: Hola, vecino. ¿No tendrás una fuga en el baño?
VECINO DEL CUARTO: ¿Otra vez con lo de la fuga? Voy a mirar, pero creo que no.
YO: Sí, vete a mirar, vete…

Aprovechando el momento, me colé en la terraza de su cocina y, barandilla abajo, tiré la mierdecilla al vecino del tercero. Regresé a la puerta de entrada justo a tiempo.

VECINO DEL CUARTO: Tengo los grifos bien cerrados, los azulejos bien secos y el suelo sin charcos ni regatos. ¿No acabas de dar con el origen del…?
YO: Es un misterio, chico. Pues nada, disculpa las molestias una vez más.
VECINO DEL CUARTO: Tranquilo; aquí estamos para lo que sea.

Bajé las escaleras y, ya en casa, esperé a que se desarrollaran los acontecimientos.

El vecino del tercero se estaría cagando en la madre que parió al del cuarto. Con la mierdecilla a cuestas, estaría subiendo a donde el vecino del quinto y, valiéndose de cualquier excusa, habría llegado a la terraza de su cocina y estaría tirando la mierdecilla a la terraza del vecino del cuarto.

El vecino del cuarto estaría ya cagándose en la madre, padre y espíritu santo del vecino del quinto. Habiendo recogido y encapsulado convenientemente la mierdecilla de su terraza, habría subido a donde el vecino del sexto y, excusa va, excusa viene, habría llegado a la terraza de su cocina y estaría tirando la mierdecilla a la terraza del vecino del quinto.

El vecino del quinto, en esos momentos, estaría cagándose en todo el árbol genealógico, habido y por haber, del vecino del sexto. Habría recogido la mierdecilla de su terraza y, en tanto que nuestro bloque es de seis pisos, estaría subiendo a la azotea, desde donde arrojaría la mierdecilla a la terraza del vecino del sexto.

Ante tal circunstancia, el vecino del sexto se estaría ya cagando en el vecino del primero, propietario de la parcela de azotea que tenía justamente sobre él. Habría recogido la mierdecilla y debería estar bajando por el ascensor para llamar a la puerta del vecino del segundo, que es justamente mi puert…

“¡Ding, dong!” Salí a abrir.

YO: Buenos días, vecino del sexto. ¿De nuevo viene usted para ver si se ve correctamente el Canal “Historia e Histerias”?
VECINO DEL SEXTO: Pues sí, veo que está usted en todo.
YO: Sí, eso dicen… Espere aquí un segundo, que lo compruebo.

Mientras yo miraba la tele, el vecino del sexto le estaría tirando, desde la terraza de mi cocina, la mierdecilla a la terraza del vecino del primero. Como tenía el culo gordo, le di tiempo suficiente a que volviera a la puerta de entrada sin ser visto.

YO: Se ve la tele de maravilla. Todos los canales.
VECINO DEL SEXTO: Será entonces cosa del enchufe de mi salón, que tiene polilla… Ya siento las molestias.
YO: No tiene importancia. Hasta la vista. Y suba usted andando, que le vendrá bien.

Ya solo en casa, esperé a que el vecino del primero, mierdecilla en mano y cagándose en todo mi ser, subiera a donde el vecino del tercero. Estaría ya colándose, con cualquier excusa, en su cocina -ya oía sus pasos sobre mí- y tirando en la terraza de la mía la mierdecilla que tan bien conocemos. En efecto, ahí tenía de vuelta mi propia mierdecilla, que debía haber recorrido todo el periplo del bloque; de lo contrario, se habría quedado por el camino haciendo escala en alguna terraza.

Cogí el teléfono y llamé.

YO: ¿INEM? Soy el de antes, que ya tengo el informe. Que sí, que sigue todo el mundo en paro.

sábado, 10 de marzo de 2012

AL POSO DEL OTOÑO TOLEDO SOPLA (XVII)

Interesantes nuevos hallazgos de la inusual obra de Luciano Nimato. Recordad que podéis enviarnos vuestros descubrimientos a anonimosindocumentados@gmail.com, y que todos los palíndromos recopilados hasta el momento pueden visitarse en http://www.palindromosanonimosindocumentados.blogspot.com/.



A la tía, por tal somier, no sonreímos la tropa ítala. (41)
¡Ah, cipote villano -tópico cipotón- allí vetó picha! (41)
Allí, Petra, puta, te parapeta tu parte pilla. (35)
Arrímala a la gala a la mirra. (23)
Azul rémora perpetró clara moda idónea en odiado mar: al corte preparó merluza. (65)

Da diva uso a mora no cocida, sádico, con aroma o suavidad. (45)
¡El bable, Nagore, derogan el bable! (27)
¿Fulana te repuso súper-etanal? ¡Uf! (27)
¿Lituania cocinaría iraní cocaína? ¡Útil! (33)
¡Ni Tecla cose! ¡Urge grueso calcetín! (29)

Sara, ni moral a Laro minarás. (23)
Sara, ¿rollete daba sabadete? Llorarás… (31)
Sátira católica -falaz erótico citó- reza la facilota Cáritas. (51)
¡Sí, Tito, ojo! ¡Con ruido diurno cojo otitis! (33)
Sin oda, el bonsái no merece ceremonias, noble adonis. (43)

miércoles, 7 de marzo de 2012

COSAS QUE PASARON AYER (XVII)

Dulcinea O’Callaghan vuelve a compartir con nosotros uno de sus notables ensayos basados en algo que le ocurrió ayer. Estimados lectores, os recordamos que podéis compartir también vuestras experiencias a través de nuestro correo electrónico (anonimosindocumentados@gmail.com) y acceder a todos los relatos haciendo clic en http://www.cosasquepasaronayer.blogspot.com/.



Ayer, como otras tantas ocasiones, estuve reflexionando en ese rato de duración indefinida que precede al sueño. Mis pensamientos me condujeron a lo que aconteció el pasado 29 de febrero, que no fue otra cosa que la reunión que celebramos los febreintinuevistas cada cuatro años.

Y es que yo nací un 29 de febrero. Parece que eso es algo bastante excepcional, pero calculando a ojo seremos unos cinco millones de personas quienes podamos decirlo, y cinco millones no es precisamente una cantidad pequeña. Lo que ocurre es que, con los grandes números, se pierde la perspectiva de las cosas, y sólo cuando te ciñes a la escala local es cuando te das cuenta de la soledad de los febreintinuevistas. Así que nos reunimos cada cuatro años, coincidiendo con la señalada fecha, para celebrar nuestra singularidad o para emborracharnos hasta las patas, que para esto último cualquier motivo parece bueno.

Somos pocos febreintinuevistas en la ciudad y alrededores, por mucho que sea una gran ciudad con grandes alrededores. De los que somos, la mayoría no saben de la existencia de estas reuniones periódicas. De los que lo saben, muchos pasan del tema. En resumen, no solemos ser más que un par de puñados de personajes que nos conocemos básicamente por vernos una vez cada cuatro años. De hecho, en una ocasión se nos coló un impostor, que vio posibilidad de fiestuqui, y nadie se dio cuenta de ello hasta que abrió la boca para decir la necedad de que cumplía 41 años.

Este último 29 de febrero, aunque no se nos coló nadie, fue la cita más animada de las tres a las que ya he asistido. Entre vinillo y vinillo surgió la propuesta de cambiar la frecuencia de las reuniones: hacerlas todos los años en vez de cada cuatro. Enseguida se crearon dos corrientes bien diferenciadas. “¡Cada cuatro años es mucho! ¡Se pierde la continuidad!”. “¡Pero la anualidad supondría la pérdida de la esencia de nuestra singularidad!”. “¡Pero nosotros cumplimos años todos los años como todo el mundo! ¡Celebrémoslo una vez al año!”. “¡Pero los José se llaman José todos los días y no por eso lo celebran todos los días! ¡Se adaptan al calendario y así debemos hacerlo nosotros!”. “¡Pero este vinillo está muy bueno y en cuatro años se va a picar!”. “¡Los Juegos Olímpicos son cada cuatro años!”. “¡Las mareas siguen la fase lunar!”… Y cosas por el estilo.

Al final se produjo una votación. Los anualistas la cagaron porque no fueron capaces de presentar una candidatura única y sus votos se dividieron entre los que querían celebrarlo los 28 de febrero y los que querían el 1 de marzo, de manera que salió elegida la opción de seguir reuniéndonos cada cuatro años, que precisamente fue lo que yo voté.

Fueron estos recuerdos del citado acontecimiento los que anoche me llevaron a reflexionar sobre la incoherencia de nacer un 29 de febrero y celebrar el cumpleaños otro día -por ejemplo, el 28- cuando el año no es bisiesto, que es casi siempre. Si uno nace el 29 de febrero, lo tiene que hacer con todas las consecuencias. En mi caso, aunque biológicamente tenga 28 años recién cumplidos, legalmente debería tener sólo 7, pues únicamente se cumplen años en la fecha coincidente con la de tu nacimiento, y eso solamente ocurre cada cuatro años.

Y me puse a reflexionar acerca de las ventajas e inconvenientes que tendría el hecho de cumplir un año legal cada cuatro biológicos.

Ahora tendría problemas para encontrar un traje de la primera comunión que me valiera. Eso sería un inconveniente. Por el contrario, tendría argumentos para poder decidir no hacer la primera comunión. Eso sería una ventaja.

Iría a 2º de Primaria y sabría más que la profesora, y en temas de informática sabría parecido a los alumnos. En estos dos aspectos no habría demasiada diferencia con la realidad.

No podría trabajar hasta dentro de… muchos años. Eso debería ser una ventaja. Pero me jubilaría doscientos años después, el sueño de los empresarios. Aunque me tendrían que pagar mogollón de cuatrienios. Uf… ¿Cuántos cuatrienios podría cumplir empezando a trabajar a los 72 años?

Más inconvenientes: no podría conducir hasta los 72 años. Tampoco podría ir a la Universidad, ni votar... En resumen, no podría conducir hasta los 72 años.

Si fuera un chico y todavía hubiera mili, me llamarían a filas a esos 72 años de edad. Desfilaría con garrocha y no con pistolón, y tendrían que tocarme la corneta a ras de sonotone.

No podría ser Presidente de Mesa Electoral hasta los 72, y podría delinquir y ser enjuiciado según la Ley del Menor. Eso sí que sería un chollo.

Si tuviera un hijo, salvo que este también fuera febreintinuevista, cumpliría años cuatro veces más rápido que yo, por lo que pronto sería legalmente más joven que él y se producirían una serie de paradojas como que tendría que ir acompañado por mi hijo para poder comprar un güisqui.

Podría usar los parques infantiles por lo menos hasta los 48 años. Siempre que me cupiera el culo.

Qué complicado. ¿Merecería la pena, por tanto, cumplir un año legal cada cuatro biológicos? Tendría que encontrar un argumento definitivo…

¡Al sinvergüenza de mi ex-novio podría denunciarle por pederasta!

Voy a empezar a reunir firmas…

domingo, 4 de marzo de 2012

BALONCESTO EN ESTADO PURO (XIV)




Aquí tenemos otra versión de los extraños fenómenos meteorológicos que afectan únicamente a los equipamientos de baloncesto. En esta ocasión no es el viento sino la niebla lo que ha impedido a los operarios municipales la correcta colocación de las canastas. En cambio, al fondo podemos comprobar lo bien puesta que está la portería, quizá porque disponga de un GPS acoplado al larguero. Nuestro colaborador Valdemaras Prevenicius nos muestra esta nueva curiosidad desde Zurita, Piélagos (Cantabria). Recordad que podéis enviarnos vuestras fotos a anonimosindocumentados@gmail.com y ver todas las imágenes en http://www.baloncestodelosanonimosindocumentados.blogspot.com/.

jueves, 1 de marzo de 2012

AL POSO DEL OTOÑO TOLEDO SOPLA (XVI)

Más descubrimientos de la prolífica e insensata obra de Luciano Nimato. Ya sabéis que podéis enviarnos vuestros hallazgos a anonimosindocumentados@gmail.com, y que todos los palíndromos recopilados hasta el momento pueden verse en http://www.palindromosanonimosindocumentados.blogspot.com/.



A niña dañará, letal, la telaraña dañina. (32)
Allí tu rival arañará la virutilla. (29)
Amada Lara, Tamara, Petra: maten al planeta Marte para matar a la dama. (55)
Ana tira masa -avena para pan, Eva- a samaritana. (37)
¡Ay! ¡A la mesa ese bebé se ase mal, aya! (27)

Ella desea ese dalle. (17)
Eso: Jorge no sacó la luz azul al ocaso negro, José. (39)
Lituano sí trocó silo por própolis o cortisona útil. (43)
Oirá tilos allá, solitario… (22)
Ruso dirá: lavó mi saca así Isaac Asimov, al árido sur. (42)

Sara, del saco pocas le darás. (23)
Sara, le parece repipi perecer; ¿apelarás? (33)
Sedes sí estafará: allana, con robos y soborno, canalla Arafat seis sedes. (59)
Sin oponer, lana colocan al reno ponis. (31)
Sonemos a moco más o menos. (21)